miércoles, marzo 18

SUSPENSIÓN DE ACTIVIDADES LECTIVAS - RECOMENDACIONES A LAS FAMILIAS 


Comparto este estupendo trabajo que ha realizado Ana Cobos, orientadora del IES "Rodríguez Moñino".


Estamos ante un momento histórico y del que no tenemos precedentes. Una situación compleja, que puede ser muy dura para algunas personas.
Las familias en estos días tienen que afrontar una situación inédita. No estamos compartiendo convivencia como cuando estamos de vacaciones, estamos en estado de alarma que restringe nuestra libertad de movimientos y ello hace que la convivencia pueda generar situaciones difíciles.
Es importante que incidamos en la responsabilidad individual, la solidaridad y el compromiso compartido de todos, como elementos que contribuirán al bienestar colectivo. 
Nuestras recomendaciones básicas están en relación a varios ámbitos:
1. Horarios y tiempos 
Resulta imprescindible establecer rutinas diarias con actividades diferenciadas. Saber a qué se va a dedicar el tiempo cada día, contribuirá a hacer más llevadera la cuarentena. Puede diseñarse un cuadrante visible para toda la familia con horas y tareas definidas para cada miembro. Tratar de "aprovechar el tiempo" para todas aquellas cosas para las que nunca lo encontramos: lecturas pendientes, series, ordenar armarios, hobbies, etc 
Intentar mantener los horarios de sueño y vigilia y comidas, lo mas parecidos a los habituales
2. Convivencia
Establecer normas básicas y mantener responsabilidades individuales, resulta no solo una tarea cotidiana más, sino una necesidad imperiosa para mantener el equilibrio mental y ayudar a evitar conflictos y discusiones familiares. Respetar los espacios comunes, mantener el orden y la limpieza, así como evitar hablar todo el tiempo del tema, son consignas básicas para todos los miembros de la familia. Si las condiciones de la vivienda lo permiten, mantener un espacio privado para cada miembro, en el que "refugiarse" y poder desconectar. Recordar que esto es un tiempo transitorio, puede que largo, pero pasará.
3. Uso de dispositivos móviles y redes sociales
Ya no concebimos nuestra vida sin internet, los móviles y las redes sociales. Afortunadamente, en este momento, sirven de válvula de escape y de conexión virtual con todas las personas (amigos, seres queridos, compañeros, profesores... ) que no podemos ver. Nos permiten saber que seguimos en contacto y especialmente para los adolescentes, que necesitan estar conectados con sus iguales, pero cuidado con la hiperconexión y sobreexposición a las pantallas, especialmente si interfiere en las horas de sueño. No se trata de estar todo el día enganchados a los móviles. En relación con la búsqueda de información, no hay que dar crédito a noticias de fuentes no oficiales, que pueden contribuir a generar malestar y desinformación.
4. Estudios
Establecer un horario de trabajo diario para estudio y tareas es una ayuda para normalizar la situación. Este horario debe de estar contemplado en las rutinas diarias. Mantener contacto con el centro educativo y el profesorado y seguir siempre sus indicaciones. Siempre que se sea posible, usar las plataformas y medios digitales que indiquen para mantener la conexión y tratar de mantener el proceso educativo que, evidentemente, no va a ser normalizado. Sin embargo, siempre pueden seguir aprendiendo; el profesorado se está volcando en ello y ofrecerá indicaciones para seguir aprendiendo a través de múltiples recursos y herramientas.
5. Gestión de las emociones
Las emociones se disparan en una situación como esta y pueden aparecer reacciones de frustración, enfado, incomprensión.... Fomentar la escucha, la comunicación y generar entornos de confianza, ayudan a favorecer la comprensión de la situación y la resiliencia. Son momentos en lo que hay que compartir todo: inquietudes, sentimientos, emociones... sin miedos y sin angustias. La sensación de falta de control sobre lo que está pasando puede producir ansiedad y estrés en algunas personas. Lidiar con esas emociones puede ser difícil, pero tenemos que tomar decisiones: no podemos evitar sentirnos de una determinada forma, pero si podemos decidir sobre qué hacemos con esas emociones.
6. Ejercicio Físico
En estos momentos, la actividad física resulta más imprescindible que nunca. Estando en casa también hay que continuar realizando actividades físicas, que son absolutamente necesarias para mantener el equilibrio emocional, mejorar la autodisciplina y disminuir el estrés. Hay muchos recursos online o que envie el profesorado de EF. Buscar un momento cada día, si es compartido en familia, puede ser divertido.
7. Otras alternativas en casa
  • Usar las ventajas de las redes sociales: museos virtuales, películas, bibliotecas, juegos didácticos...
  • Fomentar la creatividad: juegos, dibujos, cocinar, ordenar, etc
  • Promover la solidaridad dentro de las posiblidades existentes: ayudar a recados a personas mayores del barrio, llamar a familiares mayores o vecinos, etc
  • Escribir, llevar un diario o bitácora, puede ayudar a volcar las emociones y servir en el futuro como herramienta de crecimiento personal.
Por último, mantener un afrontamiento positivo: poner el foco en todo lo que si podemos hacer ahora, tratando de obviar lo que no podemos hacer.
Y por supuesto, seguir siempre todas las recomendaciones de las autoridades sanitarias y las normas de la cuarentena.
#quedateencasa
Resumimos estas recomendaciones en esta infografía.